Nuestro proyecto se basa en la creación de una utopía, para la que nos centramos en el edificio de la Friche de la Belle de Mai, ya que a nuestro parecer, es un espacio que ya posee ese carácter utópico dentro de una ciudad como Marsella.
Para la potenciación de este espacio se han realizado varios cambios, tanto en el interior como en el exterior. Estos cambios pretenden crear un espacio mágico, un espacio cambiante, donde según donde nos encontremos, el entorno nos ofrecerá distintas sensaciones.
En este tarro plasmamos esta idea de espacio cambiante, como un elemento colonizador (en nuestro proyecto mayoritariamente han sido los graffitis, que como hemos dicho en ocasiones anteriores es un emblema de apropiación del espacio) se apodera del espacio y lo transforma en algo mágico.
El mecanismo de esta microestructura consiste en el accionamiento de un pequeño motor eléctrico, que al girar tirará de una serie de hilos invisibles, que a su vez harán subir los elementos de color transformando el espacio anterior, como ocurre en nuestra utopía.
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